Entendiendo PM

El material particulado, o PM, se mide comúnmente como un indicador de la calidad del aire. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el PM, que consiste en una mezcla de partículas sólidas y líquidas en el aire, "afecta a más personas que cualquier otro contaminante". PM10 incluye partículas que tienen diámetros de 10 micrómetros o menos, y PM2.5 incluye partículas con diámetros de 2,5 micrómetros o menos. PM2.5 incluye partículas ultrafinas como las de los gases de escape de diesel que, cuando se inhalan, alcanzan las partes más profundas de los pulmones y pueden pasar fácilmente al torrente sanguíneo. La exposición significativa a la contaminación por material particulado se ha asociado con enfermedades cardíacas, enfermedades respiratorias, malos resultados del parto, demencia y muerte.

El material particulado no es de ninguna manera el único contaminante en el aire que tiene impactos negativos en la salud humana. Otros contaminantes   que a menudo se miden son el ozono troposférico, monóxido de carbono, óxidos de azufre, óxidos de nitrógeno y plomo. Estos pueden tener una variedad de efectos negativos en la salud humana. Por ejemplo, el ozono, óxidos de azufre y óxidos de nitrógeno son irritantes que pueden causar o empeorar el asma y otras enfermedades respiratorias. El plomo es un neurotóxico que mata las células cerebrales, lo que conduce a una disminución del coeficiente intelectual e impactos neuroconductuales; proporciona un ejemplo de restricción regulatoria que conduce con éxito a niveles más bajos de un contaminante dado que el plomo se ha vuelto menos frecuente en la contaminación del aire en Colombia desde que el gobierno restringió su presencia en la gasolina a partir de 1990.

Sin embargo, PM2.5 es el foco principal de nuestra discusión sobre la calidad del aire en Bogotá en esta plataforma por dos razones. En primer lugar, porque los expertos locales de Bogotá lo citan con frecuencia en la calidad del aire de diferentes áreas como el contaminante más prevalente. Y en segundo lugar, porque es lo que los activistas ciudadanos y específicamente el proyecto CanAirIO han elegido medir y centrar en las conversaciones con los responsables de la formulación de políticas. Si bien la relación entre PM2.5 y los otros contaminantes es compleja, la OMS lo describe como “un indicador indirecto común de la contaminación del aire”, y vale la pena señalar que el material particulado es a menudo, aunque no siempre, una co-emisión de los mismos procesos contaminantes que producen óxidos de azufre y óxidos de nitrógeno, especialmente los que involucran el consumo de combustibles fósiles, e incluso pueden formarse como subproducto de las reacciones químicas cuando dichos contaminantes entran en contacto con otras sustancias atmosféricas comunes.